El dinero no es escaso, hay mucha riqueza esperando por ti
Por: Miranda Gomez
La persona promedio (esa que, si no cambia, nunca llegará ser rica)
cree que existe una cantidad limitada de dinero, y que es necesario
sufrir, batallar y pelear por su parte, antes de que alguien más llegue y
se la lleve.
Ese tipo de persona vive en un mundo de temor y ansiedad, porque está
convencida que el dinero es difícil de ganar y aún más difícil de
conservar. Debido a años de estar forjando creencias limitantes, sufre
de una relación dolorosa con el tema del dinero, lo que garantiza que,
efectivamente, nunca amasará más que una cantidad modesta del mismo.
Y por otro lado, los ricos ocupan el lado opuesto: aunque muchos de
ellos se han visto expuestos, tanto en su ambiente familiar como en la
escuela a los mismos pensamientos y creencias limitantes, en un momento
dado fueron capaces de reprogramarse a si mismos, cambiando sus
creencias y desarrollando una relación sana con el dinero.
Los ricos saben que el dinero fluye hacia las buenas ideas que son
correctamente ejecutadas en la práctica. Y saben que como no hay límites
para la creación de buenas ideas, entonces tampoco existen límites para
la cantidad de dinero que se puede obtener de ellas.
Así que mientras la mayor parte de la población dirige sus energías a
“ganar dinero”, los ricos se concentran en identificar problemas y
necesidades, generar ideas y soluciones para los mismos, y llevarlas a
la práctica. El dinero, así, fluye automáticamente.
Los ricos usan el dinero como una herramienta para alcanzar los
objetivos que se proponen, mientras que la mayoría ve al dinero como un
fin en si mismo.
Cuando alguien ve al dinero como una meta que hay que alcanzar, por
lo general ocurre que ya no importa lo demás, y pasan por encima de
quien sea para lograrlo. Quizás lleguen a tener dinero, después de todo,
pero a un costo muy alto: quedarse sin gente alrededor. Todos conocemos
a alguien así: el compadre o el carpintero o el ex – amigo a quien ya
no queremos volver a ver porque nos estafó.
Pero
las personas que son verdaderamente ricas no consideran al dinero como
la cumbre, sino como la herramienta que les permite vivir la vida sin
ataduras y hacer realidad sus sueños.
Cuando el dinero llegó a alguien porque ese alguien ha creado
soluciones a los problemas de los demás, ese dinero por lo general se
usa para beneficiar a su poseedor, si, pero también a los demás. El
ejemplo más conocido de esto es Bill Gates, quien, a pesar de haber
donado ya más de 20 mil millones de dólares a diversas causas benéficas,
aún es el hombre más rico del mundo.
Pero existen muchas otras personas
que usan su fortuna también para ayudar a los demás.
La razón del porqué estas personas dan y dan y siguen dando sin
temor, es porque saben que el dinero no es escaso, que existe tanto
dinero como sea necesario. No tienen la mentalidad de mezquindad y
limitación de la mayoría.
Este es el mundo de las personas que se han hecho ricas a sí mismas,
un mundo en el que la falta de dinero es desconocida. Las personas de
este mundo saben que siempre habrá problemas y que cada problema
representa una oportunidad de crear dinero.
Si ellos pueden crear tanto dinero, tú también puedes hacerlo.